Cirugía refractiva

Descripción:

Aproximadamente 1/3 de la población adulta por debajo de los 40 años presenta algún tipo de error de refracción (miopía, hipermetropía o astigmatismo) que requiere gafas para alguna o todas las tareas de su vida diaria. Existen distintas técnicas quirúrgicas para abordar cada uno de los defectos de graduación según las características de cada ojo: El Dr. Arnalich prescribe de forma individualizada la más segura y la que proporciona la mejor calidad visual para cada caso/necesidad.

LASIK

Es quizás la técnica más frecuentemente utilizada para la corrección de los defectos de refracción óptica. No es un procedimiento doloroso porque se aplica unas gotas de anestésico local que anulan la sensación corneal. Ambos ojos se operan al mismo tiempo y el procedimiento suele durar 10-15 minutos. Primero el láser femtosegundo crea una solapa ultrafina o “flap” en la córnea. Ese flap se levanta para exponer el estroma corneal sobre el cual se aplicará el laser excimer encargado de remodelar la cornea para la graduación deseada. Este tratamiento se hace personalizado y existe un detector de pupila que permite de forma automática que el laser corrija los movimientos que pueda hacer el ojo durante la cirugía. Incluso puede pararse si es necesario hasta que el ojo vuelva a la posición deseada. Tras esto, el flap se vuelve a colocar en la posición original quedando la superficie del ojo intacta. La recuperación visual es muy rápida y desde el día siguiente la persona puede realizar prácticamente su actividad cotidiana, aunque se aconsejan unos días sin realizar esfuerzos extremos, por ejemplo en el trabajo.

Esta técnica, de rápida recuperación, se puede realizar siempre que exista una córnea sin anormalidades en cuanto a forma y siempre y cuando el grosor de córnea que quede tras la ablación sea suficiente para no comprometer su integridad. Defectos de graduación extremos, córneas finas o una combinación de ambas variables, pueden contraindicar este procedimiento.

Ablación de superficie corneal con laser excimer (LASEK o PRK)

Se trata de una técnica muy segura que da una excelente calidad visual, idéntica a la cirugía LASIK, y que consiste en la aplicación del láser excimer directamente sobre la superficie corneal para remodelar la córnea según la graduación prescrita, sin necesidad de crear un flap. No es un procedimiento doloroso porque se aplica unas gotas de anestésico local que anulan la sensación corneal. Ambos ojos se operan al mismo tiempo y el procedimiento suele realizarse en 10 minutos. Tras la ablación con láser se coloca una lentilla terapéutica para disminuir las molestias y acelerar el proceso de recuperación. El postoperatorio es más largo que en el LASIK porque en este caso la superficie del ojo no está intacta y es necesario que ocurra una cicatrización de la superficie. A partir de los 5-7 días el paciente puede funcionar sin problemas.

Es especialmente útil en casos de córneas sin el grosor suficiente o con anomalías en la forma, siempre que se descarte patología corneal subyacente.

Implante de lentes fáquicas (ICL)

También conocido como lente de contacto implantable (ICL), este procedimiento es útil para los pacientes menores de 40 cuando la corrección con láser no esté indicada debido a condiciones como ojos secos intratables, córneas delgadas o donde la prescripción de gafas del paciente quede fuera de los límites de lo que puede/debe ser una cirugía segura y eficaz. La ventaja de este procedimiento sobre la cirugía refractiva con extracción del cristalino y el implante de lente intraocular es que los pacientes conservan la habilidad natural de enfoque del ojo porque conservan su propio cristalino. Además, otra ventaja sobre la cirugía de láser es que no se elimina tejido corneal y es totalmente reversible.

El procedimiento se lleva a cabo como un procedimiento ambulatorio bajo anestesia local y no es doloroso. La lente se implanta a través de una incisión corneal sin suturas y suele tardar 10-15 minutos. Una vez que el implante está en su lugar, el paciente no lo siente y tampoco lo ven los demás. Al estar fabricado con un material inerte tampoco provoca rechazo.

Cirugía de cristalino transparente

Este procedimiento está indicado en aquellos pacientes en los que, tanto la cirugía ocular con láser como la cirugía de lente de contacto implantable no se debe llevar a cabo, ya sea porque presentan cambios en la transparencia del cristalino, una alta hipermetropía, o una presbicia asociada importante, que hace los otros tratamientos sean menos eficaces.

El Dr. Arnalich utiliza implantes de lentes premium que pueden corregir el astigmatismo como lentes intraoculares tóricas o lentes para presbicia o vista cansada que pueden dar a una persona visión de lejos y de cerca simultáneamente con el uso de una lente intraocular de varios focos. Arnalich también tiene experiencia con combinaciones de estas opciones, como es el caso del uso de la lente multifocal tórica. El procedimiento normalmente se realiza como en un ambulatorio bajo anestesia local y no es doloroso. La lente se implanta a través de una incisión corneal sin suturas y habitualmente tarda unos 10-15 minutos.